miércoles, 25 de mayo de 2011

Noemí Márquez


Biografía y obras:

Nace en Valencia, Venezuela, en 1933. Realiza sus estudios en Milan, Italia, luego continúa en la Escuela de Artes Plásticas "Cristóbal Rojas" de Caracas, donde se gradúa en Arte Puro, especialidad cerámica, teniendo como Profesores a Sergio González y Reina Herrera, entre otros. Realiza cursos en cerámica avanzada en Skidmore Collage, Saratoga Springs, Estado de New York y Penland School of Crafts, Penland, en Carolina del Norte.

En Caracas participa en seminarios de los profesores Warren Mackenzie, Clarie Illian, Odile Culas, David Leachn, Linda Christianson, Gerda Gruber, Michael Mason, Madola, Enrique Mestre entre otros. Es miembro fundador de la Asociación Venezolana de las Artes del Fuego y ocupa su
presidencia en el período 1982-1984. Asociación con la que continúa colaborando.

Nace en Valencia, Venezuela, en 1933. Realiza sus estudios en Milán, Italia, luego continúa en la Escuela de Artes Plásticas "Cristóbal Rojas" de Caracas, donde se gradúa en Arte Puro, especialidad cerámica, teniendo como Profesores a Sergio González y Reina Herrera, entre otros. Realiza cursos en cerámica avanzada en Skidmore Collage, Saratoga Springs, Estado de New York y Penland School of Crafts, Penland, en Carolina del Norte.

En Caracas participa en seminarios de los profesores Warren Mackenzie, Clarie Illian, Odile Culas, David Leachn, Linda Christianson, Gerda Gruber, Michael Mason, Madola, Enrique Mestre entre otros. Es miembro fundador de la Asociación Venezolana de las Artes del Fuego y ocupa su presidencia en el período 1982-1984. Asociación con la que continúa colaborando.

Bibliografía: http://galeria.uc.edu.ve/resenas.php?id=68&idexpo=39&actual=1






miércoles, 18 de mayo de 2011

Feliciano Carvallo (II)


Biografía y obras:

Nació en Naiguatá, estado Vargas, Venezuela el 11 de Noviembre de 1920.

Pintor ingenuo. Autodidacta. En 1945 conoció a Armando Reverón, de quien recibió los primeros consejos sobre preparación de telas y utilización del color.

El descubrimiento de Feliciano Carvallo en 1947 señala el comienzo del auge de la pintura ingenua en Venezuela. Una exposición individual en el Taller Libre de Arte de Caracas, lo dio a conocer en 1949. En 1955 el crítico de Arte Gastón Diehl le organiza una exposición en el Instituto Cultural Venezolano Francés. A partir de 1966 las obras de Carvallo han participado en varias confrontaciones

internacionales, como en la Galería Villand & Galanis, de París y en la exposición “Ingenuos Actuales de América” efectuada en el Museo de Arte Moderno de Madrid en 1967.

Sus visiones ingenuas y sencillas de fiesta de pueblos, episodios del folklore, pintados con un colorido refinado y armonías contrastadas, sin basarse nunca en la observación de la realidad, Carvallo añade su poder de invocación de mitos y fábulas de encanto poético que reflejan un mundo afro-americano que le viene a su memoria por vía ancestral. La técnica de Carvallo es de una rara minuciosidad en la representación de escenas con imágenes nítidas de efectos decorativos. Sus cuadros se fundan en la narración de una anécdota. Carvallo ha contribuido con su obra a enriquecer el panorama de la pintura popular que sigue teniendo en él a uno de los artistas Venezolanos más representativos.

Recompensas: 1965: Mención Honorífica, Salón Oficial y premio Antonio Edmundo Monsanto, Salón Arturo Michelena Valencia(Edo. Carabobo); 1966: Premio Nacional de Pintura y Premio Armando Reverón, Salón Oficial.

Bibliografía:

http://artesanosdevenezuela.blogspot.com/2010/09/feliciano-carvallo-artista-popular.html










miércoles, 11 de mayo de 2011

Victor Millán



Biografía y obras:

Víctor Millán, “Hijo de Natividad Díaz y de Carmen María Millán, nació en Punta de Araya del estado Sucre el 15 de agosto de 1919. Aldea en la cual permaneció hasta 1930 cuando su familia se trasladó a Cumaná. Desde muy niño trabajó como mandadero. (…) También fabricó silletitas y construyó sus primeros barquitos. “Siempre en Cumaná me disfrazaba y salía en comparsas de la burriquita, el pájaro guaraldol, el carite y el pájaro tricolor, bailando hasta cansarme”.

Apenas cumplidos los 13 años realizó su primer viaje como aprendiz de marino en la goleta Carúpano; más tarde serviría en el carguero Cumaná y por último en el vapor Maracaibo, llegando hasta la Guaira en 1936; se empleó como caletero en los muelles, trabajo que realizaba desde por la mañana hasta la puesta de sol, cargando pesados fardos y cajas; cargando y descargand, hasta ser reclutado por el ejercito e incorporado al cuartel de Trujillo, donde aprendió a leer y a escribir y aún le sobró tiempo para dibujar escudos y asuntos patrióticos, como la batalla de Venezuela contra Colombia ya que, comparado con la caleta cuyo horario de sol a sol no conoce descanso, la vida militar le resultó más bien holgada.

Luego de licenciado, Millán regresó a Punta de Araya, donde volvió a desempeñarse como marino hasta 1944, cuando recaló nuevamente en la Guaira, retomando la caleta portuaria. Se reencuentra con una amiga de Cumaná Carmen Antonia Aranguren y contraen matrimonio, instalándose en el barrio Canaima de Maiquetía así conoció a Feliciano Carvallo quien, a comienzos de 1950, se había trasladado desde Naiguatá. “El compadre Feliciano no me ha enseñado a pintar” – explicó Víctor a su entrevistadora, Antonieta Madrid, en 1969 – Realmente Víctor no estudió bajo la dirección de Feliciano, ni éste jamás dictó clases a ningún pintor. Cuando Víctor tomó de Feliciano fue un recurso técnico: el recubrimiento del soporte con un fondo monocromo de sapolín o pintura industrial azul, rojo, negro, amarillo, verde, etc., recurso el cual se mantuvo fiel hasta el último de sus cuadros.

La obra de Víctor Millán, - a diferencia de la Feliciano Carvallo que explota casi exclusivamente de manera arquetípica el tema de las selvas -, explora el paisaje marino, la naturaleza muerta, el desnudo femenino, el retrato, los pueblos y las manifestaciones religiosas de origen popular. En relación a lo planteado nos dice Juan Calzadilla “Feliciano Carvallo y Víctor Millán son como los faros de una escuela naïf que se caracteriza por el registro del colorido luminoso y alegre que se presta a las soluciones geométricas de un perspectivismo plano, mental.”

En 1951 Millán fue incluido en la ‘Muestra de pintura de hoy’, organizada por el Taller Libre de Arte. Este momento marca el inicio de su vida pública, por lo cual figura en el grupo de los llamados fundadores del arte ingenuo venezolano: Feliciano Carvallo, cronológicamente el primero. En 1971 la familia Millán se muda a Marapa. Ya para entonces la situación económica de los Millán había cambiado en virtud de la creciente demanda y valoración de la obra de ambos. Todo el dinero que he ganado pintando –le confesó al Dr. Luis Enrique González en 1974 – lo he empleado en mi casita y los gastos de mi hogar, porque considero que el pintor tiene que vivir del arte. El pintor que no vive del arte o tiene plata o no es pintor, porque la pintura jala mucho; jala alimentos, jala pinceles y otras cosas que al artista le hacen falta. Y como no me considero egoísta, estoy haciendo una construcción para hacer una Casa de Cultura en el barrio. Yo estoy haciendo un gran esfuerzo con esta obra, donde estoy gastando todo lo que tengo por el solo interés de darles cultura a los niños de Marapa.

El 27 de diciembre de 1974, Carmen sufre una caída cuando Víctor estaba en Cumaná, ella muere. A los pocos meses se casa con Hercilia Ilarreta, también pintora. Víctor promovió su “lanzamiento” en el Salón de Lectura en Cumaná y en la Escuela de Artes Plásticas de Carúpano en 1976. Venden el inmueble de Marapa y los Millán Ilarreta se residencian en la Vela de Coro, ciudad natal de Hercilia.

En Abril de 1991, se lleva a Caracas más de cien cuadros para exponerlos “que es donde están los compradores”, le comenta a Da Antonio, al momento de encontrarlo en el aeropuerto de Coro vía a la capital. Ese mismo año el 18 de septiembre, en sus recién cumplidos 72 años, reseñan en la prensa la muerte de Víctor Millán, golpeado por el hampa común. Millán al igual que Ruskin, estaba convencido que la admiración y el arte eran la panacea para apartar a los hombres de la envidia y sus consecuencias. Millán trabajó toda su vida en la búsqueda de este ideal. En 1969 por su iniciativa se crea el taller de Arte Popular Armando Reverón, cuyo objetivo según palabras del pintor: “queremos hacer de él un centro libre de trabajo donde puedan pintar todos los pintores espontáneos de esta zona ( La Guaira), aunque al pueblo no se le puede pedir mucho. La gente sufre de ignorancia y de mal entendimiento”.

Bibliografía:

http://artesanosdevenezuela.blogspot.com/2010/09/victor-millan-artista-popular.html









miércoles, 4 de mayo de 2011

El paisaje (II)




Carlos Otero















Marcos Castillo

















Joaquín Caicedo



















Pablo Benavides

















Antonio Alcantara
















Armando Lira